Los Aztecas y Mayas fabricaban con el cacao, una bebida fuerte, espesa y amarga que condimentaban con otras especias y lograban combinaciones realmente peculiares. La llegada del cacao a España pasó desapercibida. El chocolate fue un regalo de los habitantes de la Isla de Guanja que no gustó a los Reyes Católicos y fue olvidado. Hasta que en el Monasterio de Piedra ocurrió algo...